COP21: PEOPLE´S CHOICE
COP21 is - in itself - already a wonder: two hundred heads of state - Humanity leaders - aware of the planet situation and ready to commit to change; the United Nations calling the world to stand for the issue; France showing courage and determination towards what is important despite their hurt; the rulers of the biggest polluters of Earth who speak Chinese and English expressing in the same language when it comes to global warming challenges; the European Commission promoting a binding long term lasting agreement; leaders of the industrialized world talking about their moral obligation; some of the world press talking to experts, digging into the issue, and helping peoples understand it. All of that is a huge step forwards for Humanity.
But perhaps one of the most meaningful moves so far in the conference is an initiative presented in Paris by Bill Gates, which brings private wealthy sector into the boat by investing their means and creativity in creating new ways of sustainable production. An initiative that added to their government’s innovative efforts, actually build a joint new vision for progress and gives true hope. On the other side, China with its 1.5 billion people and old ways still going, has a difficult task but, besides their commitment in the conference, the plan they recently launched for the next fifteen years already carries a sustainable vision. As a whole, for the beginning of the Conference, Obama´s fifteen minutes opening speech sums up well the reasons to take action, eliminates fears about "opposition" between growth and sustainability, and shows a path forward.
But, besides the agreements the World hopes the Conference will reach, for those agreements to be sustained in time there are two other vital factors that cannot be missed: common people, and the young generation. People´s demonstrations in Paris and in other parts of the world might be a way to ask for results but, somehow, in a not totally fair way. Stopping global warming is not only a ruler´s responsibility. To accomplish the task, governments need their private sector and their peoples. That is why participation as those of Bill Gates or Mark Zuckerberg gives a meaningful example. But people, every person in his or her life, has a daily personal decision to make about global warming. Change here could be resumed in a simple question: What do I want? Vs. What do I need? Should Humanity move from a nonstop wanting things to keeping needs in a satisfying, enjoyable level, the planet would feel the pressure released.
And it should not create fears about consumption levels for one single reason: if instead of a few consuming a lot everyone consumes some, levels of consumption in a globalized connected world, rather than stay steady, will rise. This is a World of 7 billions inhabitants. As it happens, fairness re-directed in a sustainable way and spread around, carries on growth for all and the planet and its peoples will hold. The young generation, from kinder garden to college, must see it now. Because all concepts - growth, technology, measures, countries, policies, money, goods, you name it - are that: concepts, things. What makes Earth unique in the universe is people. All measures and decisions the Conference make will become reality, will matter - materialize - once peoples of the world understand them and blend them into their own daily lives. Besides rulers efforts, it is also, in fact, people´s choice.
For now, and for all wonder-full efforts being made in COP21 by leaders, climate workers, scientists, experts, governments, private sector, journalist, and common unknown people, as well as those made before the Conference like Pope Francis Laudeato Si, it is only fair to say here - on behalf of present and future generations of Earth People: thank you.
/Silvia Davila MM, EarthPipol, Dec. 1, 2015 (c)
COP21: ELECCION DE LA GENTE
La conferencia COP21 es ya, en sí misma, una maravilla moderna: doscientos jefes de Estado - los líderes de la Humanidad - consientes de la situación del planeta y dispuestos a comprometerse con el cambio; las Naciones Unidas llamando al mundo a rodear el tema; Francia mostrando determinación hacia lo que es importante pese a su pena; los dirigentes de los dos países que más contaminan la Tierra quienes hablan en chino e inglés, hablando el mismo idioma cuando se trata de los retos del calentamiento global; la Comisión de la Unión Europa pidiendo un acuerdo vinculante, duradero y de largo plazo; líderes del mundo industrializado hablando de su obligación moral para con el planeta; la prensa del mundo hablando con expertos, investigando el tema y ayudándole a la gente a comprenderlo. Todo eso es un paso gigante para la Humanidad.
Pero, quizás, uno de los pasos más significativos hasta ahora en la Conferencia lo presentó Bill Gates quien trajo consigo al pudiente sector privado que ahora se sube a este tren al invertir sus recursos y creatividad en crear nuevas formas de producción sostenible. Una iniciativa que, sumada a los innovadores esfuerzos de su gobierno, crea de hecho una visión conjunta de progreso que da verdadera esperanza. Del otro lado, China, con sus 1.5 billones de habitantes y sus viejas formas de producción todavía en marcha, además de sus compromisos en la Conferencia, lanzó a comienzos del año su plan de desarrollo para los próximos quince años que ya incluye una visión sostenible. En el conjunto del comienzo de la Conferencia, el discurso de quince minutos de Obama resume bien las razones para la acción, disipa el miedo sobre una supuesta oposición entre desarrollo y sustentabilidad, y muestra un camino a seguir,
Pero, además de los acuerdos a los que el Mundo espera llegue la Conferencia, para que estos sean sostenibles en el tiempo, hay dos factores vitales que no se pueden pasar por alto: la gente común y la generación joven. Las demostraciones populares en París y en otras partes del mundo pueden ser una forma de pedir resultados pero, tal vez, de una forma no muy justa. Detener el calentamiento global no es solo una labor de los gobernantes. Para cumplir con la tarea, los gobiernos necesitan de su sector privado y de sus gentes. Es por eso que participaciones como la de Bill Gates o Mark Zuckerberg dan un ejemplo muy significativo. Pero - la gente - cada persona tiene una decisión diaria que tomar en relación con el calentamiento global. Aquí el cambio se puede resumir en una pregunta: Qué quiero? Vs, Qué necesito? Si la Humanidad virara de un permanente querer cosas a mantener las necesidades en un buen y satisfactorio nivel, el planeta sentiría suavizada su carga.
Este hecho no debería causar temor en cuanto a los niveles de consumo por una simple razón: si en lugar de pocos consumiendo mucho, todos consumen algo, los niveles de consumo en un mundo globalizado y conectado más que permanecer estables, crecerían. Este es un Mundo de 7 billones de habitantes. Tal y como sucede, la equidad redirigida en una forma sostenible y repartida en el mundo trae consigo crecimiento para todos y el planeta y sus gentes se salvan. La nueva generación - desde el jardín infantil hasta la universidad - tienen que verlo ahora. Porque todos los conceptos - crecimiento, tecnología, medidas, países, políticas, dinero, productos, y demás - son eso, conceptos, cosas. Lo que hace a la Tierra única en el universo es la gente. Todas las medidas y decisiones que tome la Conferencia de París serán realidad, se materializarán una vez la gente las entiendan y las asuman en su vida diaria. Además del esfuerzo de los gobernantes, es también y de hecho, una elección de la Gente.
Por ahora, y por todas los maravillosos esfuerzos que hace COP21 a través de los líderes, trabajadores del clima, científicos, expertos, gobiernos, sector privado, periodistas y gente común desconocida, y de aquellas que se hicieron antes de la conferencia como el Laudeato Si del Papa Francisco, es apenas justo decir aquí - a nombre de la presente y futuras generaciones de la Gente de la Tierra: Gracias.
/Silvia Dávila MM, EarthPipol, Dec. 1, 2015 (c)